Kanye West, el rapero más importante de la última década, tiende a mezclar diversas formas de arte con su música. Lo audiovisual y la danza siempre han estado presente en sus trabajos, y su nueva obsesión parecen ser los mini-filmes. Ya lo demostró con "Runaway" el corto de 30 minutos el cual es musicalizado con canciones de su último álbum "My Beautiful Dark Twisted Fantasy". Ahora prepara la continuación a dicho proyecto, con una producción en Medio Oriente, específicamente en Abu Dhabi, Dubai (Emiratos Árabes) y Doha (Qatar). Según el diario online "The Observer", West habría mandado emisarios a conversar con las autoridades de dichas localides, para gestionar la opción de grabar en los territorios, ya que la industria fílmica está fuertemente controlada por los gobiernos de esas naciones. El interés del músico por el lugar nació el año pasado, después de un concierto en Abu Dhabi,por lo cual, según la fuente anónima de The Observer, "él está genuinamente entusiasmado con crear una pieza que resalte la cultura de la región".
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